¿Qué es torear? Pepe Hillo, su arte de burlar al toro y la primera filmación de una corrida de toros

En su Tauromaquia, Pepe Hillo escribió lo siguiente:

Es regla general en todos los toros quando usan de la acción ofensiva, que parten precipitados a coger el objeto que se les presenta; y como que las armas que esgrimen las llevan en la cabeza, quando quieren ofender la humillan, tirando una cabezada, la repiten si quedan con el objeto. […] porque si el toro, para ofender, corre al objeto con precipitación, y le tira una cabezada para cogerlo, ¿qué cosa más natural y cierta para burlarlo que reducirlo al mismo objeto, y luego que llegue, quitárselo de delante? Este es el constitutivo esencial de la suerte y el principio elemental con que se forman todas las que se conocen.

La concepción de la tauromaquia en Pepe Hillo es ante todo la de un arte defensivo: el arte de «burlar al toro». Este es el tipo de toreo que impera hasta el siglo XX, en el que la aparición de Joselito y Juan Belmonte inician el camino hacia un arte de la lidia más ofensivo, y que, por tanto exija más al toro: se pasa, en definitiva, de burlar al toro a mandar sobre él, como lo ha puesto de manifiesto José Carlos de Torres. Para nosotros es fundamental tener en mente este cambio de perspectiva, y mucho más en un encaste como el nuestro: una de las virtudes que más primamos en las tientas es que las becerras metan la cara, una cualidad que no se encuentra tan fácilmente en la rama Santa Coloma como en otras.

Les dejamos con un link a la primera grabación de una corrida de toros, hecha por los hermanos Lumière en Nîmes en 1898-1899. Uno de los matadores es probablemente «Guerrita». El inconveniente principal de la grabación es que la cámara aún tiene que estar ubicada en un punto fijo, lo que dificulta enormemente el seguimiento de la lidia. Pero en los fragmentos en los que está grabada la lidia, se puede apreciar muy claramente la diferencia del tipo de tauromaquia del momento, que burla pero no manda.

‘Guerrita’ tomó la alternativa de manos de ‘Lagartijo’ el 20 de septiembre de 1877 y toreó su última corrida en la Feria del Pilar de Zaragoza, el 16 de octubre de 1899